Uno se pregunta, si nos dedicamos a esto, a pesar de ser personal privado sometido a las empresas facturadoras de seguridad, porque no tenemos tal condición cuando un inspector de hacienda, un perito y otros tantos curros que ni siquiera son de 'seguridad' ya sea pública o privada, ostentan tal condición en el desempeño de su trabajo.
Pues bien, será porque no interesa -no a los curritos, claro, si no a otros...- pero baste un pequeño ejemplo a modo de tres artículos espaciados en el tiempo, para darse cuenta de que o cambia algo en este sector, o lo tenemos crudo.
Hay muchas más, artículos, noticias, reseñas... basta con meterse en Google o Yahoo -por ejemplo- y nos pueden aparecer una cantidad ingente de casos como los que a continuación se extraen.
Lamentable. Pero esto es seguridad privada, señores. Es lo que hay. Es lo que somos. ¿O no?
Hmmm...
Los vigilantes de seguridad piden ser agentes de la autoridad
Los vigilantes condenan el olvido de los compromisos adquiridos con ellos
G. Fonteseca/Jerez | foto: esteban
El Sindicato Profesional de Vigilantes, que curiosamente tiene susede en un local ubicado en el Parque Atlántico, en Jerez, vienetrabajando desde hace meses para que se modifique la Ley de SeguridadPrivada y se les vuelva a considerar como agentes de la autoridad, unacircunstancia que les permitiría enfrentarse con más garantías altrabajo que desarrollan a diario.
Esta consideración la tuvieron ya en el pasado, pero fue con lamodificación de esta ley llevada a cabo en 1992, se les retiró estacircunstancia, dejándoles desamparados frente a la acción de losdelincuentes a los que con mucha asiduidad se enfrentan.
Por eso, en estos momentos en los que se ha abierto un debatesobre la posibilidad de considerar a los profesores de centrosescolares autoridad para que tal medida pueda disuadir a padres yalumnos de utilizar la violencia contra ellos, el colectivo vuelve ainsistir en esa exigencia, a la vez que recuerdan un decálogo decuestiones que serían necesario cambiar de la propia ley para prestarun servicio mejor a los ciudadanos.
El Sindicato Profesional de Vigilantes subraya que lascircunstancias y el contexto social que justificó la anterior reformade la Ley, no tienen vigencia en nuestros días, pues “como todo sabemosy constatamos a diario, por diversas causas han subido los niveles deinseguridad en el país, y por tanto, en nuestro sector, lostrabajadores no podemos entender como se viene desaprovechando elpotencial en seguridad que puede aportar nuestra actividad a lasociedad, ya que con un mínimo de respaldo jurídico y de colaboraciónreal entre las distintas fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, seaprovecharía un caudal que es gratuito y privado en favor de unasociedad que lo demanda y necesita”.
Olvidados por el Gobierno
El sindicato hizo pública una nota días atrás en la que recordabala “gesta” de un compañero para llamar la atención de la sociedad y loscompromisos que se hicieron hace unos meses que hoy ya se han olvidado.
En concreto, desde el día 6 al 26 de septiembre del pasado año, unvigilante de seguridad copó las portadas de muchos diarios nacionales einformativos de este país, donde autoridades y políticos con los quecontactó a lo largo de su recorrido a pie de más de 500 kilómetros(desde Málaga a Madrid), se comprometieron a estudiar lasreivindicaciones del sector de la seguridad privada.
Hoy, casi seis meses después de su sufrida gesta, nada queda delos compromisos y voluntades asumidas ante este trabajador ejemplo defuerza y razones, que simbolizó el sentir generalizado de más de100.000 vigilantes de seguridad de este país.
Recuerda el sindicato que registraron ante el Ministerio delInterior que dirige Pérez Rubalcaba, un documento similar al queregistró el vigilante antes referido y que, en síntesis, exige ladevolución del carácter de agentes de la autoridad que en su día teníanlos antiguos Vigilantes Jurados y que con la modificación de la Ley deSeguridad Privada, 23/92, se eliminó de un plumazo.
“Es una insensatez, dice el Sindicato Profesional de Vigilantesde Seguridad exigir a los vigilantes, casi 100.000 trabajadores en todaEspaña, que realicen unas funciones de seguridad, equiparables apolicía y guardia civil, sin contar con la protección jurídica que sedesprende de este carácter de agentes”.
El Sindicato se pregunta cómo se les puede exigir el cumplimientodel artículo 492 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, cuando actúancomo un particular podría hacerlo y, por tanto, deberían actuar sólo enlos tres supuestos de delitos (flagrancia fuga y rebeldía). “En estoscasos actuamos en una clara desigualdad e indefensión, frente al restode Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, pues normalmente actuamossolos, no por parejas como el resto de cuerpos, vamos desarmados y sinelementos de defensas, físicas ni jurídicas, pues dicho carácterconfiere al agente en su ejercicio una opinión de perito y experto enla materia, así como poder imputar la desobediencia o resistencia a laautoridad cuando así sucediese – que por desgracia es muy frecuente encada actuación policial debidos a los altos índices de delincuenciaexistentes y que se convierte en una herramienta jurídica indispensablepara el buen desempeño de nuestras funciones”, sentencia el sindicato.
Esta exigencia es “una hipocresía más de la norma que nosregula”, afirman ya que se les exigen dichas competencias, sin que lesdoten de los medios mínimos. “A nadie se le ocurriría exigir a unalbañil que levante una casa sin facilitarle previamente delpalaustre”, ponen como ejemplo.
Que no caduque la TIP
Además de esto, los vigilantes de seguridad exigen que se eliminede la ley de seguridad privada la caducidad de sus tarjetas deidentificación profesional (TIP), y licencias de armas, pues basta condos años de inactividad o desempleo, para no poder seguir ejerciendocomo vigilantes, “cuando hemos acreditado mediante exámenes de accesoante el Ministerio del Interior una serie de conocimientos equiparablesal resto de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
A juicio de los vigilantes, esta norma carece de sentido y no encuentra precedente en otra profesión en España.
Igualmente, piden la inclusión dentro del catálogo de estudiosprofesionales de un módulo de grado medio para el acceso a la profesiónde vigilante de seguridad y otros de grado superior, para susespecialidades de escoltas, explosivos y guardería de campomedioambiental, a fin de fomentar profesionales de vocación y unasustancial mejora en su formación, hasta hora en manos privadas y portanto, asumiendo el coste de la misma aquellos profesionales que larealizan, sin que además cuenten después con homologación académica deestos estudios profesionales.
También pedimos Interior que realice verdaderas inspecciones a lasempresas de seguridad, para que doten a sus vigilantes de los elementosy mínimos auxiliares: radioteléfonos, emisoras, linternas, uniformidad,reciclajes, y un largo etc., de carencia que soportan los trabajadoresdel sector. Y que cuando se expedientan a empresas y clientes dichassanciones sean realmente efectivas y se vigile su posteriorcumplimiento y subsanación, pues existe un gran intrusismo y pirateríaempresarial sin que la autoridad competente haga nada por evitarlo.
En síntesis, el sindicato de vigilantes considera que el sector dela seguridad privada, “necesita una reforma urgente que ampare a sustrabajadores y por ende al objeto social que se nos encomienda, laseguridad de los ciudadanos, y deje de ser regido por la hipocresía dequienes nos gobiernan, que ha sabiendas de las deficiencias observadasy mil veces denunciadas, no hace nada por evitarlo, en aras de uninterés puramente económico de quien se convierten en nuestrosverdaderos explotadores: Gobierno y administraciones varias, empresasde seguridad y clientes usuarios que nos contratan”.
El sindicato pide que al votar se tenga en cuenta quien olvida
El Sindicato profesional de Vigilantes condenan “el olvido con elque todos, autoridades y gobierno, dejan morir y desoyen por intereseseconómicos las exigencias de cien mil trabajadores de la seguridadprivada, hora es por tanto, de que aquellos grupos políticos queasumieron el compromiso de incluir en sus programas electorales –enpocos días verán la luz- incluyan nuestras legitimas reivindicaciones”.Por todo ello, realizan un llamado sin precedentes a todos lostrabajadores del sector, pues este sindicato que se define sin colorpolítico, pide a todos los trabajadores, que “otorguen su voto sólo aaquellos partidos que contemplen en sus programas nuestras exigencias,y castigar con el mismo olvido, a quienes no cumplieron y sólo buscaronla fotografía fácil y electoralista. La fidelidad a la ideologíapolítica sólo debe ser respetable cuando es comprometida ycorrespondida, por que cuando se olvidan las promesas, es cuandoconstatamos la infidelidad y la traición”. Por todo ello, concluye elSindicato Profesional de Vigilantes con una frase que sentencia queeste colectivo sólo debía votar a quienes les escuchen y no a quienesles han olvidado.
Diez ideas para cambiar la ley de Seguridad Privada
G. F./Jerez
El Sindicato Profesional de Vigilantes ha elaborado un conjunto depropuestas que consideran deberían tenerse en cuenta a la hora demodificar la Ley de Seguridad Privada. Todas ellas las consideranbásicas y necesarias para poder desempeñar, con un mínimo de garantíasy seguridad personal, el cometido social que la citada Ley lesencomienda y exige.
Propuestas
Piden la devolución del carácter de agentes de la autoridad o, ensu defecto, un estatuto jurídico que les ampare en la actuacionespoliciales que a diario llevan a cabo. Carecer de esta protecciónjurídica les deja, subrayan, en clara desventaja en sus intervenciones,pues para desempeñar las funciones que les exige la Ley necesitan unmínimo de herramientas jurídicas frente a los casos de resistencia a laautoridad, -actualmente inexistente- que soportan.
En segundo lugar, que no caduque la tarjeta de identidad, puesrompe la igualdad con respecto del resto de trabajadores de este país,ya que al estar más de dos años sin ejercer se pierde la habilitación,siendo necesario volver a tener que superar nuevamente las pruebas deacceso a la profesión. No existen otros precedentes de profesionesdonde esto suceda.
En tercer lugar, que las prácticas de tiro sean realmenteprácticas y no exámenes continuos, como sucede con el resto de lasfuerzas de seguridad. Las prácticas o ejercicios de tiro han de ser asu entender voluntarias y sin controles de puntuación, pues no superarun simple ejercicio les lleva a la excedencia forzosa, mientras serealiza el tiro de recuperación.
En cuarto lugar, que a la profesión se acceda mediante módulos degrado superior de F.P. y que, por tanto, la Seguridad Privada, seaincluida dentro del catálogo de módulos profesionales del Ministerio deEducación y Ciencia, de forma que el acceso a la profesión sea gratuitoy oficial, no mediante centros de formación privados, como prevé laactual Ley.
En quinto lugar, que la uniformidad sea común para todas lasempresas, evitando el actual confusionismo entre los ciudadanos ycreando una conciencia única de cuerpo de seguridad entre lostrabajadores de la seguridad privada y el pueblo.
En sexto lugar piden una legislación contra el intrusismo, dondedonde a su entender se hace necesario una mejor definición de laactividad de seguridad privada y sus funciones sociales, quedandodefinida la figura del Vigilante de Seguridad, bien diferenciada de losactuales Auxiliares de Servicios, no regulados por esta Ley.
En séptimo lugar, la sustitución de la placa distintiva, porconsiderarse entre los trabajadores del sector de un pésimo gusto ydiseño, que en absoluto contribuye en la mejora de la imagen públicaque pretenden para el sector y sus profesionales. Así mismo, piden queen las denuncias que en el desempeño de sus funciones tengan querealizar, baste como identificación del Vigilante de Seguridad elnúmero de la misma, sin que sea necesario como hasta ahora, tener queexponer en la misma los datos personales del trabajador, por razonesobvias de la protección de datos.
En octavo lugar, la sustitución del armamento, pues el revólverautorizado en los servicios, carece de eficacia y de capacidad derespuesta frente al armamento que hoy utilizan las bandas organizadas ydelincuencia en general, entendiendo que debe ser sustituida por unarma automática y de mayor capacidad de carga.
En noveno lugar, la obligatoriedad de realizar los servicios porparejas, y de forma inexcusable en los servicios nocturnos y de grandessuperficies, pues difícilmente pueden ofrecer seguridad desde unaposición de inseguridad personal. La efectividad de la seguridad exigeintervenciones rápidas y a menudo imprevistas, por lo que resulta atodas luces ineficaz tener que esperar la llegada de refuerzos o deapoyo policial, por lo que los Vigilantes de Seguridad que trabajan ensolitario asumen un grave riesgo personal que sin duda se minimizaríacon esta medida.
Y en décimo y último lugar, una mejora de los medios auxiliares yde comunicación ya que las Empresas de Seguridad Privada reducen almínimo la inversión económica en este tipo de medios auxiliares:radio-teléfonos, emisoras, linternas, chalecos antibalas endeterminados servicios de mayor riesgo, etc., debiendo ser exigido elcumplimiento de este requisito por las inspecciones policiales que serealicen.
Publicado ayer en:
http://www.publicacionesdelsur.net/historial/domingo/diarios/cadiz/jerez/act_local/03diarios.htm
APUÑALADO UN VIGILANTE DE SEGURIDAD EN PLENO DIA EN EL METRO.
Quedó
herido grave después de que dos individuos, a los que
había llamado la atención, le apuñalaran en uno de los andenes de la estación de Estrecho.
HERIDAS EN MUSLO Y HOMBRO
Un vigilante de seguridad de 41 años resultó el sábado herido grave después de que dos individuos "de aspecto sudamericano" a los que les había llamado la atención, le apuñalaran en uno de los andenes de la estación de Metro de Estrecho, en la Línea 1, según informaron a Efe fuentes policiales.
Un portavoz de Emergencias Madrid explicó que hacia las 11.00 los sanitarios del SAMUR acudieron a la citada estación de Metro de la Línea 1 y situada a la altura del número 181 de la calle de Bravo Murillo, donde socorrieron a la víctima, que presentaba dos heridas de arma blanca, una de ellas en el hombro izquierdo y otra en la parte posterior del muslo de la pierna izquierda.
El vigilante, a pesar de sangrar "abundantemente" por las heridas, se encontraba consciente y fue trasladado por los sanitarios al Hospital La Paz en estado grave, según las mismas fuentes.
Por su parte, un portavoz de la Jefatura Superior de Policía informó a Efe de que testigos presenciales explicaron que dos individuos, "de aspecto sudamericano, se habían dado a la fuga tras apuñalar al vigilante, quien les había llamado la atención".
--------------------------------
Un vigilante de seguridad, apaleado por un inmigrante
Publicado el 1 Noviembre, 2007 Publicado en la sección Actualidad |
A sus 27 años, Sisal M. es un viejo conocido de los policías del distrito de Sant Martí, en
Barcelona. El joven, de origen marroquí, ha pasado los últimos años de su vida entrando y saliendo de los calabozos por multitud de delitos. Es tan persistente en su actividad ilícita preferida, el robo, que hasta los vigilantes de seguridad le tienen fichado
La madrugada del pasado 18 de octubre, Sisal fue más allá y agredió brutalmente a un vigilante de unos 60 años que le había cogido con las manos en la masa, ha confirmado un portavoz oficial de los Mossos d’Esquadra.
El Centre de la Vila, un centro comercial del barrio de la Barceloneta, fue el escenario de la paliza. La víctima se encontraba haciendo su particular ronda nocturna cuando detectó a Sisal en actitud sospechosa. Ya le conocía: es uno de los cacos habituales. A esas horas -las dos de la mañana- el centro comercial está cerrado. Pero, desde la calle, se puede acceder a algunos locales.
El vigilante vio como Sisal reventó la puerta de un bar y se dirigió hacia él para retenerle. El joven había salido del bar con la caja registradora y, al sentirse cazado por el empleado, reaccionó de forma violenta. El choque físico entre el joven y el hombre armado no duró demasiado. Sisal no dio tiempo a reaccionar al vigilante. Le propinó un fuerte golpe en la cabeza, que dejó al hombre inconsciente y tendido en el suelo.
“No hicieron nada”
Lejos de detener ahí la agresión y marcharse con el botín, el joven volvió sobre la víctima, que continuaba sin sentido, y le propinó diversas patadas en los costados y en las piernas, según otro vigilante de seguridad. “Hay personas que pasaron por allí, vieron cómo estaba apaleando al compañero y no hicieron nada. Ni siquiera llamaron a la policía”, relató.
La policía llegó al poco rato al centro comercial. El hombre, que presentaba diversas lesiones, fue trasladado al Hospital del Mar. Allí recuperó la consciencia y pudo explicar a los agentes de la policía autonómica lo sucedido. El vigilante no tuvo demasiados problemas en esbozar un retrato de Sisal. Y como la policía ya le conocía de sobra y le tenía “controlado”, según fuentes del caso, no fue difícil localizarle.
Efectivos de seguridad ciudadana del área básica policial de Sant Martí detuvieron a Sisal a las siete de la mañana, apenas cinco horas después de la paliza. En esta ocasión, Sisal fue arrestado acusado de un delito de robo con violencia e intimidación y otro de lesiones. Debido a la gravedad de los hechos, está ingresado en prisión, según los Mossos.
El caso es un ejemplo de ladrón multirreincidente. La policía autonómica ha reduplicado los esfuerzos para combatir a este tipo de delincuentes, que crean inseguridad ciudadana y, sobre todo, sensación de impunidad. Aun así, los Mossos admiten la dificultad de luchar contra ellos, ya que enseguida quedan en libertad por la poca entidad de los delitos que cometen. En su caso, acumula un total de 16 antecedentes policiales. El vigilante, que trabaja para la empresa de seguridad Athena, se encuentra fuera de peligro.
--------------------------------